Con una canción en tojolobal, lengua de origen maya, la diputada del PT, Roselia Jiménez, celebró en tribuna la aprobación de la Ley del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas, pues es un reconocimiento a los mexicanos que han estado por años sometidos a la exclusión, la marginación, el olvido y el abandono, anotó.
Con 430 votos a favor y una abstención, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa en la que se establece que esta institución será la autoridad en los asuntos relacionados con los pueblos indígenas y afromexicanos.
UNA NUEVA RELACIÓN CON EL ESTADO
Entre sus atribuciones están: normar, diseñar, coordinar y evaluar las políticas públicas, programas y proyectos para garantizar los derechos de estos sectores del país, así como fortalecer sus culturas e identidades.
Irma Juan Carlos, presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas en San Lázaro, sostuvo que han sido muchos años en los que las comunidades han estado sometidas a tutelas externas, por lo que con esta legislación se busca crear una nueva relación entre los pueblos indígenas y el Estado.
